lunes, 30 de mayo de 2011
Porque él lo es todo.
Mirarle a los ojos y sentir que tu mundo cambia de forma, que tu corazón empieza a latir el doble de rápido que de costumbre, intercambiar con él miradas cargadas de entendimiento, disfrutar el sabor de cada leve contacto. Oírle y que un precioso escalofrío recorra tu columna vertebral de arriba a abajo... No conocerle casi, pero saber que no puedes vivir sin verle más de dos segundoss y saber que le quieres con todas tusfuerzas, que te encanta disfrutarle con los cinco sentidos...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario